miércoles, 9 de septiembre de 2009

Diagnostico


Ecografía de un feto de 20 semanas, fecha para la cual empiezan a aparecer los signos preeclámpticos.
Se diagnostica la preeclampsia cuando en una mujer embarazada aparece repentinamente una elevación de la presión arterial—en dos lecturas separadas tomadas al menos 6 horas aparte de 140/90 mmHg o más—y un nivel de proteína en la orina de 300 mg o más. Una elevación de la presión arterial de 20 mmHg del valor sistólico (el valor más alto) y de 15 mmHg del valor diastólico (el valor más bajo), aunque no llegue al requerimiento de 140/90, es considerado de importancia aunque ya no se considera diagnóstico. Originalmente se consideraba que las hinchazones—edema, especialmente de las manos y cara—eran signos de importancia diagnóstica de la preeclampsia, pero la práctica médica actual solo la hipertensión y la proteinuria son requeridos para el diagnóstico. A pesar de ello, las hinchazones inusuales, en particular en las manos, pies o cara, apreciables al dejar una indentación al presionar el área en cuestión, debe ser considerado significativo y reportado al profesional de salud. Algunas madres con preeclampsia tienen una especial tendencia a la agregación plaquetaria y a elevados niveles de serotonina séricos.
A pesar de que la eclampsia es potencialmente letal, la preeclampsia suele ser asintomática, por ello su detección depende de los signos investigados, cada signo debe ser considerado importante y no menospreciado. El dolor epigástrico, el cual refleja un trastorno hepático, y es característico del llamado síndrome HELLP, puede ser fácilmente confundido con acidez, un problema muy común en el embarazo. Sin embargo, el dolor epigástrico no es en realidad un ardor, como la acidéz, no se expande hacia la garganta, se asocia con sensibilidad hepática, puede irradiarse a la espalda y no se alivia con los antiácidos. Con frecuencia es un dolor severo, descrito por algunas pacientes como el peor dolor que habían sentido. Ocasionalmente, algunos profesionales refieren a estas pacientes a un cirujano para descartar un abdomen agudo o colecistitis, por ejemplo.
Por lo general, ninguno de los signos de la preeclampsia son específicos, incluso las convulsiones en el embarazo son frecuentemente causadas por otros trastornos y no por la eclampsia. De modo que el diagnóstico depende en que coincidan varias características preeclámpticas, siendo evidencia conclusiva el que se alivie con el alumbramiento. En algunas mujeres aparece una elevación de la presión arterial sin la proteinuria, situación que lleva el nombre de hipertensión inducida por el embarazo o hipertensión gestacional. Tanto la preeclampsia como la hipertensión gestacional son condiciones serias que requieren monitoreo tanto del bebé como de la madre.

DIAGNOSTICO DIFERENCIAL
La eclampsia y la preeclampsia pueden ser confundidas con otras enfermedades, incluyendo, hipertensión crónica, insuficiencia renal crónica, trastornos epilépticos primarios, enfermedades del páncreas y de vesícula, púrpura trombocitopénica trombótica e idiopática y el síndrome urémico hemolítico. La preeclampsia siempre debe ser considerada una posibilidad en cualquier embarazo por encima de 20 semanas de gestación. Es especialmente difícil de diagnosticar si ya existe una enfermedad concomitante como la hipertens

Epidemiologia

La preeclampsia puede ocurrir hasta en 10% de los embarazos, usualmente en el segundo y tercer trimestre y después de la semana 32. Aunque infrecuente, algunas mujeres pueden presentar signos de preeclampsia desde la semana 20. Es mucho más común en mujeres con su primer embarazo, —hasta el 85% de los casos ocurren en primigrávidas y frecuentemente la incidencia disminuye considerablemente en el segundo embarazo. Se sabe que una nueva paternidad en el segundo embarazo reduce el riesgo—excepto en mujeres con una historia familiar de embarazos hipertensivos pero al mismo tiempo, el riesgo aumenta con la edad materna,por lo que ha sido difícil evaluar el verdadero efecto de la paternidad en el riesgo de preeclamsia. El riesgo es cuatro veces mayor para mujeres en cuyas familias han habido casos de preeclampsia. El riesgo más significativo en la aparición de preeclampsia es el haber tenido preeclampsia en un embarazo previo. La preeclampsia es más frecuente en mujeres con hipertensión, diabetes previos al embarazo, enfermedades autoinmunes como lupus eritematoso, en pacientes con trombofilias, insuficiencia renal, y mujeres con una historia familiar con preeclampsia, mujeres con obesidad y mujeres con múltiples gestaciones (gemelos, por ejemplo). El riesgo sube a casi el doble en mujeres de raza negra. Es posible desarrollar preeclampsia después del parto, hasta un período de 6 a 8 semanas después del alumbramiento. Por ello, se debe prestar atención las 24-48 horas seguidas del parto con el fin de detectar posibles síntomas y signos de preeclampsia.
La morbilidad y la mortalidad materna en la preeclampsia son el resultado de disfunción terminal de un órgano, hemorragia cerebral, y eclampsia; mientras que para el recién nacido lo son la restricción del crecimiento intrauterino y el bajo peso por prematuridad

Tratamiento de la preeclampsia

¿Cuál es el tratamiento para la preeclampsia?


Si usted tiene preeclampsia, dar a luz al bebé es la mejor manera de protegerla y proteger a su bebé. Esto no siempre es posible, porque el bebé puede ser demasiado pequeño para poder vivir fuera del vientre de la madre.
Si el parto no es posible debido a que es el embarazo es muy temprano, se pueden tomar pasos para controlar la preeclampsia hasta que el bebé esté listo para salir al mundo. Estos pasos incluyen bajar la presión arterial, con descanso en cama o medicamentos, y mantener a usted y a su bebé muy bien observados. En algunos casos, será necesaria la hospitalización.
Una manera de controlar la presión alta cuando uno no está embarazada es cortar la cantidad de sal en su comida. Esta no es una buena idea si tiene presión alta durante el embarazo. Su cuerpo necesita la sal para mantener el fluido de los líquidos en su cuerpo, así que es necesario que coma una cantidad de sal normal. Su doctor le indicará cuanta sal debe comer cada día y cuanta agua necesita beber al día.
Su doctor le puede decir que tomar aspirina o calcio puede prevenir la preeclampsia. Su doctor también puede indicarle que se acueste en su lado izquierdo mientras descansa. Esto aumentará la cantidad de orina y quitarle peso de encima a sus vasos sanguíneos grandes. Muchos doctores dan sulfato de magnesio durante el parto y por unos días después, para evitar la eclampsia. Hable con su médico acerca de estas posibilidades de tratamiento.


¿Si mi doctor decide que el bebé necesita nacer temprano, tengo que tener una cesárea?


Esto depende en lo que usted y su médico decidan. Una cesárea (una operación para sacar al bebé) será usualmente el caso si usted o su bebé se encuentran en peligro. Si las cosas no se encuentran tan serias, su doctor puede usar un medicamento (como la oxitocina) para inducir o empezar el parto, y usted puede dar a luz normalmente.

SINTOMAS DE LA PREECLAMPSIA

Síntomas de la preeclampsia...


Si usted tiene cualquiera de estos síntomas, llame a su médico de inmediato:


-Dolor de cabeza severo
-Mareos
-Timbre o zumbido en los oídos
-Somnolencia
-Visión doble
-Ceguera de golpe
-Vomitando sangre
-Hinchazón excesiva de los pies y las manos
-Pequeñas cantidades de orina o nada de orina
-Sangre en su orina
-Latidos del corazón rápidos
-Náusea excesiva
-Vómitos excesivos
-Fiebre
-Visión borrosa
-Dolor en el abdomen


¿Si tengo presión alta quiere decir que tengo preeclampsia?


No necesariamente. Si su doctor se da cuenta que su presión se encuentra alta, él o ella la observará cuidadosamente, buscando ciertos cambios que pueden indicar la presencia de la preeclampsia. Además de la presión alta, la preeclampsia tiene otros 2 problemas relacionados, la hinchazón excesiva y un alto contenido de proteína en la orina. Muchas mujeres con presión alta durante el embarazo no tienen proteína en la orina o hinchazón excesiva, y por eso no tienen preeclampsia.


¿La hinchazón quiere decir que me está dando preeclampsia?


Si usted tiene hinchazón tampoco quiere decir que tiene preeclampsia. Un poco de hinchazón durante el embarazo es normal. Por ejemplo, sus sortijas o zapatos pueden quedarles un poco apretados. La hinchazón es más seria si no se va con un poco de descanso, o si es muy obvia en la cara o las manos, o si es una subida de peso rápida, como de 5 libras en una semana.


¿Qué pruebas pueden demostrar si tengo o no preeclampsia?


Ninguna prueba por sí sola indica que usted tiene preeclampsia. Su presión sanguínea será chequeada cada vez que venga a sus visitas médicas. Un alza súbita de presión puede ser una seña temprana de que puede tener preeclampsia. Un examen de orina le puede indicar a su médico si hay proteína en la orina. Su doctor puede ordenar una serie de pruebas de sangre, que pueden demostrar que tiene preeclampsia. Si usted tiene señas de sufrir preeclampsia, su médico querrá observarla muy de cerca, una vez a la semana y hasta todos los días.


¿Cuál es el peligro que yo y mi bebé corremos si tengo preeclampsia?


La preeclampsia puede prevenir que la placenta (que le provee aire y comida al bebé) reciba suficiente sangre. Si la placenta no recibe suficiente sangre, su bebé recibirá menos aire y comida. Esto puede causar un bajo peso al nacer y otros problemas para el bebé.
La mayoría de mujeres con preeclampsia siguen dando a luz a bebés saludables. Unos cuantos casos desarrollan una condición llamada eclampsia (convulsiones causadas por toxemia), que es una condición muy seria para la madre y el bebé y puede causar problemas. Afortunadamente, la preeclampsia se detecta temprano en las mujeres que reciben cuidados prenatales regulares, y la mayoría de problemas pueden ser prevenidos.

preeclampsia


¿QUE ES LA PREECLAMPSIA.....?

La preeclampsia, también llamada toxemia, es un problema que les ocurre a las mujeres durante el embarazo. Puede occurir durante la segunda 1/2 del embarazo. Su doctor le enseñará a reconocer los siguientes síntomas de la preeclampsia: presión arterial alta, hinchazón que no se va, y grandes cantidades de proteínas en su orina (encontradas durante las pruebas de orina).

¿Quiénes están en riesgo de contraer la preeclampsia?
La preeclampsia es más común en el primer embarazo de una mujer y en las mujeres con hermanas o madres que han tenido preeclampsia. El riesgo de sufrir preeclampsia es más alto si la madre está cargando a 2 o más bebes, si la madre es adolecente y si tiene más de 40 años. Otras mujeres en riesgo son las que ya tienen la presión alta o sufren alguna enfermedad de los riñones antes de que ellas salgan embarazadas. La causa de la preeclampsia no se conoce.